Participar en un programa de doble titulación puede ser, si se hace correctamente, una experiencia increíble para los estudiantes, así como para las instituciones de origen y de acogida. Además de mejorar las perspectivas profesionales y crear redes profesionales, la intención es mejorar lo que ya se ofrece en la institución de origen incorporando nueva experiencia académica o de investigación, lo que permitirá al estudiante completar un programa en ambas instituciones.
Nivel Maestría: Permite la realización de un programa de nivel Maestría en dos instituciones.
Doctorado: Permite la realización de un programa de nivel Doctorado en dos instituciones
En ambos casos, las instituciones crean nuevos arreglos en línea con las expectativas y requisitos del programa formal, pero con la intención de aprovechar las ventajas únicas que se originan de la conjunción de ambos programas.
Participación de los socios
Requisitos: Las universidades siguen una serie de procedimientos formales para garantizar que un programa de doble titulación cumpla con sus respectivos requisitos a fin de garantizar que se pueda otorgar un título una vez finalizado el programa.
Supervisores: Es el trabajo de los supervisores el que hace posible el establecimiento de los programas de doble titulación, ya que no solo deben cumplir con las expectativas locales, sino también crear condiciones de aprendizaje extraordinarias para el estudiante.
Además de cumplir con los requisitos académicos y de otro tipo de ambas instituciones, el estudiante se ve expuesto a las contradicciones, similitudes, incógnitas, diferencias y todo lo que se encuentra entre los extremos de un espectro de conocimiento. Son las decisiones y los enfoques de los supervisores en conjunto los que informan y guían al estudiante en la exploración de sus estudios e investigaciones. Si bien las instituciones se encargan de los aspectos logísticos del programa, la acción reside en el proceso de aprendizaje al que se expone el estudiante.
